Desde el momento en el que
conocí el estado de Montana, me enamoré de su gente y sus estilos de vida,
cuando llegué por primera vez de vacaciones, fui al "Downtown" (Centro
de la ciudad) y me quedé con la boca abierta, las tiendas pequeñas, ninguna corporación
grande se ha adueñado de este estado, por lo mismo la gente tiene los pies en
la tierra respecto a los precios. En Seattle "Quien gasta mas, es quien
tiene mas y por lo mismo es mejor que otro", bueno, aquí no puedo traer mi
iPod mientras ando de compras nunca falta quien se acerca a saludar, cuando
manejo debo de estar atento de quien me levanta la mano para decir
"Hola" de carro a carro, Las cuestiones políticas son mucho mejor, en
Seattle, se gastaron un par de millones de dólares en la "DECISION"
de que si se cobraría "cuota" en un puente o no... Mi licencia para
salir a pescar me cuesta un ojo de la cara y no suficiente, tenía que
"avisarles" cuando salía a pescar, qué pesqué y a donde fui. En
Montana, solo agarro mis cosas y me largo a donde quiera. Seattle, no es un
lugar malo para vivir, pero para mi estilo de vida es incomodo. Desde el sábado
comenzamos a meter todo en cajas, el Domingo a media noche estábamos saliendo
de Seattle, de la nada apareció Joe Torres un poco antes del atardecer, casi me
hizo llorar, mi hermana y yo nos dimos un abrazo y fue ese abrazo el que me dio
fuerzas y me hacia falta un abrazo de un amigo y Joe me lo dio junto con esas
palabras de aliento que me hacían falta escuchar, porque no es lo mismo que la
familia te lo diga a que un amigo lo reafirme.
Y yo allí, manejando la
camioneta Diesel por mas de 10 horas, cruzando montañas, ríos y viendo la nieve
derritiéndose logrando un efecto de cascada.
En la soledad de mi
camino pensé muchas cosas, al final, así siempre sucede, yo, manejando la
camioneta, Darin la otra camioneta y mi carro me estacionado en Washington con
la promesa de que volvería por el, Darin y yo de camioneta a camioneta, separados
pero con la misma meta, pensé mucho en Joe, no esperaba que hiciera tiempo en
su agenda para irme a dar un abrazo, digo, siempre lo he puesto en mi lista de
buenos amigos, pero me tomó por sorpresa y llenó el huequito de las "dudas
de mi viaje".
También pensé en las
personas que pido al cielo no volver a ver, porque puedo ser falso y decir que
todo esta bien, pero en realidad, aunque esas personas y yo nunca nos
insultamos son indeseables en mi vida, hasta eso, me sentí orgulloso de como me
retire de sus vidas, sin escándalos y quizás hasta ni ellos saben que me siento
feliz al saber que no los volveré a ver. - Total, únicamente son 4 personas y
uno de ellos ni frecuenta los lugares que cuando vaya a Seattle quizás visite.
El Viernes, fui a la
casa de mi hermana Gaby y Jeffrey, que puedo decir que no sea obvio?, ... Gaby
siempre ofrece sus brazos abiertos, comimos pizza y platicábamos mientras la TV
presentaba "Lord of the Rings" desde su apartamento; vi la ciudad
desde lo alto por ultima vez, el Space Needle que por un tiempo me había impresionado
se convirtió en una foto Polaroid, en un grato recuerdo.
Gaby siempre es
sentimental, y yo cuando veo llorar a alguien me da por llorar, pero no sabía
como explicarme hasta que me encontré en la soledad del camino, yo me moría de
felicidad por irme a Montana y ver a llorar a Gaby me preocupaba que ella en
realidad no quería que me fuera, pero esa solo era mi idea, porque Gaby solo me
dijo una vez "No es que te vayas sino que ya no esta la facilidad que para
vernos solo caminamos un par de cuadras" ... y en el camino pensé que solo
un día nos separa y que gracias a Dios con mi trabajo me puedo dar vacaciones
cada semana, Gaby es independiente y no dudo que sepa hacer algo grande. - ....
1:45pm ... Allí estaba mi casa, un nudo en mi garganta me hizo pensar que si es
posible llorar de felicidad.
Axel Samano